El viajar no siempre es un placer. Una de las peores pesadillas que se enfrenta a la hora de subirse a un avión es la pérdida del equipaje, con todos los problemas que esto puede provocarle a un pasajero en tránsito. Por eso, en los últimos años se puso de moda instalar rastreadores en las valijas con el objetivo de prevenir que se extravíen.
Cuando se enteró que su vuelo a Washington tenía una escala con transbordo, la analista de datos Valerie Szybala decidió comprar un Airtag -un pequeño dispositivo portátil fabricado por Apple- para dejarlo entre sus pertenencias y reducir así las chances de sufrir este inconveniente.