WASHINGTON (AP) — El presidente Donald Trump advirtió el sábado que el país podría dirigirse a sus semanas “más difíciles” hasta la fecha conforme aumenten las muertes por el nuevo coronavirus, pero al mismo tiempo manifestó una creciente impaciencia con las normativas de distanciamiento social y su enorme deseo que el país reanude actividades y la paralizada economía vuelva a la normalidad.
“Habrá muchas muertes, lamentablemente”, declaró Trump en un sombrío inicio de su conferencia de prensa diaria sobre la pandemia. “Habrá muertes”.
Acompañaron a Trump el vicepresidente Mike Pence, la coordinadora de la respuesta de la Casa Blanca contra el coronavirus, la doctora Deborah Birx, y el doctor Anthony Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas del gobierno federal.