Los ministros de Finanzas europeos acordaron el jueves un plan de choque para apoyar la golpeada economía de la Unión Europea por el coronavirus destinando más de 500.000 millones de euros para Estados, empresas y desempleados, y la creación de un futuro "fondo de estímulo".
El dinero anunciado no se desembolsará automáticamente, pero estará disponible para los Estados que lo soliciten.
Los jefes de Estado y de gobierno de la UE aún deben aprobarlo.
Este plan se sumará a las inversiones anunciadas a nivel nacional así como a las medidas ya emprendidas por la UE, en particular la suspensión de las reglas de disciplina presupuestaria y la flexibilización de la reglamentación sobre las ayudas estatales.