MÉDICOS Sin Fronteras comenzó una intervención de emergencia en la ciudad de Tapachula, Chiapas, donde alrededor de 40,000 personas están varadas en espera de respuesta de asilo por parte de las autoridades mexicanas.
“La situación de decenas de miles de personas migrantes de América Central y del Sur de México es de una vulnerabilidad extrema debido a las continuas deportaciones desde Estados Unidos y al fracaso de las políticas de asilo”, se lee en un comunicado de esa organización médico-humanitaria.
MSF denunció las condiciones de hacinamiento y falta de acceso a servicios médicos y sociales que sufren estas comunidades tanto en el norte como en el sur del país, por lo que esta semana desplegó un equipo de emergencia en Tapachula para proporcionar asistencia médica, psicológica y de trabajo social.