Durante los últimos años, cuando intento ordenar un poco dentro de mi mente el alboroto cada vez mayor con respecto a la política sobre el aborto en todo el mundo, siempre regreso a dos acontecimientos.
Estos ocurrieron en dos países distintos, en diferentes años y sus resultados fueron opuestos. Sin embargo, no podía quitarme la idea de que el hecho de verlos juntos podría ayudarme a entender algo importante sobre el modo en que funciona el mundo.
El primero de estos acontecimientos fue el 25 de mayo de 2018, cuando la República de Irlanda votó de manera abrumadora por una enmienda constitucional que legalizaba el aborto.