A diferencia de lo que sucedió en temporadas anteriores, Paris Saint-Germain no hizo pesar de la misma manera su poderío y su jerarquía individual. Sin ir más lejos, el equipo ahora comandado estratégicamente por Mauricio Pochettino arribó a la última jornada de la máxima categoría del fútbol de Francia sin depender de sí mismo para ser campeón.
Sucede que los capitalinos llegaron a esta última jornada un punto por debajo de Lille, de sorprendente campaña en la Ligue 1 de Francia. Pero, lejos de bajar los brazos, Paris Saint-Germain afrontó el compromiso como visitante de Brest con la ilusión intactada poder quedarse con una nuevo título en el ámbito doméstico, aunque no sea nada fácil.