La muerte de un hombre que cayó desde la tribuna Sívori Alta del Monumental conmueve al fútbol argentino y tiñó, lo que debería haber sido un juego, de profunda tristeza. “Nos dimos cuenta al segundo que no había nada para hacer”, cuenta a LA NACION uno de los hinchas presentes, que se encontraba a metros de donde cayó la víctima.
“Cuando voy a la cancha siempre me paro en el anillo del Monumental, en la Sívori baja, ahí es donde cayó el hincha, justo dos metros detrás mío”, explica Fernando Romero a LA NACION.