CÓRDOBA.- Carolina Lourenço, para todos “Carito”, nació en Río Cuarto (Córdoba) y, después de estudiar gastronomía, a los 21 años se fue con una propuesta de trabajo a España. Hoy tiene 38. La idea era no regresar, avanzar con un proyecto propio junto a su pareja Germán Carrizo, también cocinero, y lo lograron. Empezaron a independizarse con una consultora y con 50.000 euros ahorrados abrieron su primer restaurante, Fierro en Valencia, con el que ella fue la primera mujer argentina en ganar una estrella Michelin.
Hoy tienen, además, el restaurante Doña Petrona y La Central de Postres, donde hacen pastelería para venta individual y para otros restaurantes.