El buffet libre parecía tener sus días contados durante la pandemia. Hacer una fila junto a otras personas para servirnos comida de un bandeja con una cuchara común no parecía la mejor opción si queríamos minimizar las posibilidades de contagio.
Pero luego de que las autoridades mundiales aseguraron de que el COVID-19 ya no es una amenaza planetaria, el buffet libre regresó con fuerza para deleitar a los comensales que aman los excesos. Los expertos aseguran que los principales beneficiarios serán los dueños de esos establecimientos porque utilizan un modelo de negocios que minimiza los costos y maximiza las ganancias.