Bayern Munich se coronó campeón de la Bundesliga. El dato no debería sorprender a nadie, si se revisa la historia: es la undécima vez consecutiva que el equipo más poderoso de Alemania se impone en su liga. Pero ésta, como ninguna de las anteriores, llegó luego de un desenlace cinematográfico, que dejó a Borussia Dortmund -que había llegado a la fecha final dos puntos por delante de Bayern- rumiando su desconsuelo en su propio estadio, donde dejó pasar una oportunidad de oro: empató 2-2 ante Mainz y resignó la posibilidad de celebrar, ya que el Bayern venció por 2-1 como visitante a Colonia y destapó un nuevo festejo, que no es uno más.