Después del subidón futbolístico y emocional que dejó el 3-0 sobre Italia, el seleccionado argentino desacelera para cerrar ante Estonia este mini-ciclo de casi dos semanas de preparación con dos partidos. Es cierto que la Finalissima en Wembley es lo que tiene más peso en el balance y las conclusiones, pero este ensayo contra el equipo báltico (110° en el ranking FIFA) servirá para ampliar la perspectiva sobre las variantes del plantel, en el cual algunos jugadores todavía deben reconfirmar o ganarse un lugar en la lista –de 23 o 26, a la espera de lo que decida la FIFA- del Mundial.