Messi levanta pasiones dentro y fuera del campo. No importa quién o de que país sean los aficionados, muy pocos no se sorprenden y emocionan al ver pasar a la estrella argentina. Ni siquiera a unos pequeños niños brasileños son ajenos aun teniendo a la Canarinha justo detrás de ellos. Messi es Messi, y está por encima de eso.
Frente a Brasil, Messi se llevó una nueva decepción con la selección argentina, la novena en su carrera, pero alegró la noche a varios niños que esperaban en el túnel de vestuario instantes antes de saltar al terreno de juego.