Los entrenamientos sirven para algo más que para prepararse para el partido que está por llegar y no perder tono físico. En ellos, sin presión, los jugadores son capaces de dar rienda suelta a sus habilidades y hacer jugadas de verdadero escándalo.
Cristiano Ronaldo ha protagonizado una esta semana que bien podría ser de Maradona. El atacante de la Juventus de Turín cogió el balón en la banda izquierda, su posición favorito, y encadenó un regate espectacular tras otro hasta terminar convirtiendo un auténtico golazo.
Cristiano recibe el balón y realiza un regate conocido como piernas locas.