Los partidos entre el Barça y el Espanyol siempre están cargados de tensión. Pero a muchos todavía debe sorprenderles aquel partido, el 13 de diciembre de 2003. Ese encuentro terminó con una cantidad de expulsiones bastante elevada. 6 tarjetas rojas sacó el colegiado Alfonso Pino Zamorano. Tres para el Espanyol (Lopo, Soldevilla e Ivan de la Peña) y otras tres para el Barça (Rafa Márquez, Cocu y Quaresma).
Seguramente, preguntando al aficionado español, no te podrá sacar otro partido en el que la cantidad de expulsiones supere a aquel clásico catalán. Sin embargo, en la parte sur del continente americano, existen algunos encuentros con una gran cantidad de jugadores que terminaron antes de tiempo abandonando el terreno de juego.