Samuel Umtiti está de vuelta, y no sólo porque regresara a la titularidad ante el Eibar. El central jugó un gran partido en la victoria del FC Barcelona en Iurúa, y aunque lógicamente le falta ritmo de competición, demostró que la decisión de no operarse fue lo mejor que pudo hacer.
La rodilla ha sido un auténtico quebradero de cabeza para Umtiti, que vio cómo, debido a las lesiones, perdió la titularidad en el centro de la zaga en favor de Clement Lenglet. Y ahora ha pasado de ser un jugador transferible en el mercado de verano a un repuesto de garantías para Ernesto Valverde.