El grupo yihadista que hace un año, el 17 de agosto, mató a 15 personas en Barcelona y dejó 100 heridos en Cambrils tenía en mente un objetivo mucho más ambicioso y perverso: perpetrar un atentado en el Camp Nou, que días después fue sede del Barca vs Betis, en el que el mexicano Andrés Guardado fue titular
Dicha deducción se originó gracias a que un grupo de investigadores se dio a la tarea de analizar el móvil de uno de los terroristas, de nombre Mohamed Hichamy, y ahí se percataron de numerosas búsquedas en torno al estadio del Barcelona una semana antes del atentado del día 17.