La Conmebol vive horas muy complicadas y cada día es una nueva sorpresa. Luego de lo que ocurrió entre San Lorenzo y Temuco en la Copa Sudamericana, esta semana llegó el show a la Copa Libertadores.
Primero ocurrió con la mala inclusión de Carlos Sánchez, que había sido suspendido hace tres años jugando para River. En Santos nunca se enteraron y fue parte del equipo que empató 0-0 contra Independiente. Por esto, el equipo brasileño deberá levantar en la revancha un 3-0.
Mientras el enojo era cada vez más grande en Brasil, apareció un documento en el que se confirmaba la suspensión de Sánchez.