Boca y River se enfrentaron por primera vez en la historia del fútbol femenino de manera profesional, en un Superclásico en el que el conjunto "Xeneize" impuso condiciones tanto en el juego como en el resultado: le propinó una goleada de 5 a 0 a su rival.
Sin embargo, y más allá de la grata noticia del arranque del certamen, quedó la sensación de indignación por el día y horario que la organización le puso al partido: martes a las 15.
Si bien hubo una cantidad de público más que aceptable teniendo en cuenta lo recién mencionado (unas 4000 personas dijeron presente en La Bombonera, con entrada gratuita para socios), es lógico pensar que de haberse disputado en un momento razonable el estadio hubiera lucido mucho más poblado, con un marco similar al que tiene un partido profesional de hombres.