Isco Alarcón ha tenido que frenar su buena temporada aquejado de una apendicitis aguda. El malagueño fue operado con éxito este pasado lunes y deberá permanecer un mes en el dique seco. Una lesión que llega en el peor momento, cuando el Real Madrid deberá afrontar una serie grande de partidos en poco tiempo.
Lo cierto es que, por muy contradictorio que parezca, a Lopetegui se le ha despejado el camino y ya no habrá debate Isco-Asensio. No tendrá que romperse la cabeza en el próximo mes para confeccionar el ataque merengue. Y es que, aunque el técnico español ha demostrado que no se casa con nadie y que si tiene que rotar lo hará, ante la Roma en el Bernabéu ya dio a entender cuál será su equipo titular en los partidos importantes, y ahí no estaba Asensio.