Cuando pensábamos que no podía existir una peor organización que la de la final de vuelta de la Copa Libertadores de América 2018 entre Boca y River, que terminó disputándose en el Estadio Santiago Bernabéu de Madrid por los disturbios en las adyacencias del Monumental, la CONMEBOL se sigue superando.
Y es que la final de la presente edición a partido único entre el "Millonario" y Flamengo iba a disputarse en Santiago de Chile, pero ante el conflicto que vive aquel país debieron modificar la sede.