La Rojita alcanzó anoche la final del torneo europeo, la cual disputará por octava vez en su historia después de cuatro títulos y tres subcampeonatos. Para lograrlo necesitó remontar ante Francia en un envite que comenzó con dudas.
Les Bleus se adelantaron en el marcador tras una serie de decisiones polémicas por parte del colegiado del encuentro. Primero no se señalaron unas manos claras de Fodé Ballo-Touré en el área y sí se hizo lo propio con una caída de Jeff René-Adélaïde, que puso más intención en ir al suelo que por el contacto.