Isco y Asensio mostraron ante el Valencia su malestar al irse rápidamente hacia los vestuarios a pesar de la victoria de su equipo (2-0). Ninguno de los dos permaneció en el campo para recibir los aplausos de la afición.
Isco entró a falta de aproximadamente diez minutos para el final sustituyendo a Ceballos. Fue el último cambio después de que Federico Valverde ingresara al campo antes que el ex del Málaga. Por su parte, el mallorquín entró en el lugar de Bale. Ninguno de los dos cuajó una buena actuación. Asensio erró una ocasión muy clara que sacó Piccini bajo palos cuando el Bernabéu ya cantaba gol.