El combinado local ha logrado rascar un empate en el tiempo de descuento después de conseguir someter a la roja en los últimos minutos. El tanto de Saúl Ñíguez al empezar el segundo tiempo no ha sido renta suficiente.
LO BUENO: Confianza local
Los noruegos tenían claro su plan de juego inicial: esperar con dos líneas de ocho hombres muy cerradas y buscar transiciones con Martin Odegaard y Joshua King. Con mucho menos balón han sido capaces de crear peligro a un nivel similar al de España en el primer tiempo. Tras el descanso, han recibido el tanto de Saúl Ñíguez (incluyendo error de Rune Jarstein) y han incrementado su presión.