Desde sus primeros años en Pachuca, Hirving Lozano demostraba tener madera suficiente para triunfar en grande y soportar cualquier reto; tiempo después lo demostró emigrando al futbol holandés y convirtiéndose en uno de los elementos más importantes para que el PSV tocara la gloria una vez más.
Ahora, Lozano emprenderá una nueva aventura, creciendo aún más en su carrera llegando al futbol italiano, con un equipo histórico como lo es el Napoli, situación que el mexicano deberá de aprovechar para seguir subiendo peldaños hacia la mesa celestial en donde comen solamente Hugo Sánchez y Rafa Márquez.