Cuando el luso aterrizó en la Juventus surgió la inevitable duda de si el jugador echaría más de menos al club o sería el Real Madrid quien salía más perjudicado. A final de temporada se ha evidenciado que ambos han salido perdiendo.
Cristiano Ronaldo y el conjunto merengue formaron una sociedad que, con más ingredientes, conquistó cuatro Ligas de Campeones en cinco campañas, algo que se dice pronto y que ya forma parte de la historia del fútbol. Tanto el jugador como el club traían una trayectoria detrás antes de unir sus caminos, bastante más negativa por parte de los blancos.