El joven extremo guineano se convirtió en el segundo jugador más joven en debutar con el conjunto azulgrana y sus quince minutos sobre el terreno de juego hicieron vibrar al Camp Nou, aunque su historia pudo ser muy diferente.
El canterano de 16 años, Ansu Fati, jugó ante el Betis su primeros minutos en un partido oficial con el primer equipo del FC Barcelona. Al finalizar el encuentro su padre, Bori Fati, se mostró muy emocionado por el debut de su hijo con los azulgranas: "Es el día más feliz de mi vida. Cuando Ansu me dijo que estaba convocado por Valverde me puse a llorar, mi mujer también.