La final de ida del Superclásico por la Copa Libertadores de América que terminó igualada 2 a 2 dejó mucha tela para cortar. Uno de los temas más hablados en la previa era el riesgo que tenían algunos futbolistas tanto de Boca como de River de perderse el partido de vuelta, en caso de que recibieran tarjeta amarilla.
En sintonía con dicho aspecto, Milton Casco y Wilmar Barrios se cruzaron fuerte en el primer tiempo y se terminaron agarrando del cuello. Allí fue cuando apareció en escena Pablo Pérez, capitán del Xeneize, que se acercó a su rival y lo sacó del tumulto para protegerlo.