Johan Cruyff es una de las figuras más reconocidas en la historia del Barcelona, y no solo por el legado que dejó allí como jugador sino también como entrenador. En honor a esta leyenda, desde el club inauguraron una estatua en un acto al que acudieron los vicepresidentes del Barcelona Jordi Moix, Jordi Cardoner, el tesorero Enrique Tombas y el presidente Bartomeu.
Además, por parte de su familia estuvieron Danny Cruyff, su mujer, y sus dos hijos, Susila y Jordi Cruyff. Bartomeu habló en el acto y dijo que "Es un momento especial, muy emotivo. Hace tres años del 24 de marzo de 2016, cuando nos dejó a todos los culés y a todos los aficionados del mundo, y nos creó un vacío.