Los Reyes Magos ya han pasado por las casas de todo el mundo dejando regalos o carbón en función del comportamiento de cada uno el pasado año. Sin embargo, a pesar de que traigan regalos, los reyes de Oriente muchas veces se equivocan y no traen lo que se les ha pedido por carta. Esto lo fue lo que le pasó a Iker Casillas, eso sí, cuando era niño.
El mismo Casillas se encargó de poner en Twitter la foto de la decepción que se llevó hace 30 años cuando le pidió a los reyes un Scalextric y acabó recibiendo un Autocross.