La Selección Española se impuso por cuatro goles a cero a las Islas Feroe en un encuentro que dominó de principio a fin. Una superioridad que no se tradujo en peligro real ante una defensa bien armada que dejaba que los rivales tocasen lejos del área, pero impedían cualquier ocasión de peligro. El juego de España fue cuanto menos aburrido y tan solo Rodrigo y Alcácer, en dos ocasiones cada uno, pudieron batir al portero rival.
De Gea (8): Tranquilo. El guardameta español tuvo un partido bastante plácido pues prácticamente no tuvo que intervenir.