Según la información de 'el Transistor' de Onda Cero, el Girona-Real Madrid de este fin de semana podría quedar suspendido.
Parece ser que la Polícia española está valorando suspender el partido por motivos de seguridad ya que hay un alto clima de crispación en Cataluña debido a la situación política que se vive en la comunidad autónoma.
Sin embargo, tanto jugadores como directivos tienen claro que el partido se va a jugar. El presidente del Girona comentó tras el partido de Copa que el ambiente, a pesar de la incertidumbre, es bueno y que no hay ningún riesgo para los jugadores y aficionados blancos.