Agustín Urzi, delantero de Banfield y de la Sub 20 argentina, es uno de los mejores proyectos que mostró nuestro fútbol en la última Superliga, gracias a su llamativa habilidad en velocidad y a la facilidad para dejar rivales en el camino.
Esa desfachatez deslumbró a Boca y River, los dos clubes más importantes del país, que comenzaron con las negociaciones para fichar al pibe con la ilusión de tenerlo en sus respectivos planteles.
Sin embargo, y luego de algunos días de incertidumbre, desde la dirigencia del “Taladro” avisaron que no lo transferirán a Argentina y le pusieron una jugosa cláusula de salida: 10 millones de dólares.