Imposible no festejarlo. Imposible no saltar de la alegría después de tanto sufrimiento. Argentina le ganó a Nigeria sobre la hora y después de días muy oscuros, celebró merecidamente su clasificación a los octavos de final.
Los jugadores se descargaron tras el agónico gol de Marcos Rojo y detrás de ellos hubo familias enteras abrazándolos. Antonella Roccuzzo, la esposa de Lionel Messi, fue una de las que utilizó las redes sociales para compartir su felicidad y apoyar a su marido.
"Vamos, mi amor", escribió la madre de Thiago, Mateo y Ciro una vez sellada la victoria sobre los africanos.