Después la cómoda victoria de mitad de semana ante Nottingham Forest por Carabao Cup, el conjunto de Erik ten Hag le ganó 2-1 a Crystal Palace en Old Trafford, donde llegó al 13°. triunfo consecutivo como local por todas las competiciones.
Pese a la expulsión de Casemiro, que complicó a la defensa en un momento clave del segundo tiempo, Manchester United se las ingenió para aguantar el resultado y trepar hasta el tercer puesto de la tabla de posiciones de la Premier League.
Tras el pitazo final, Shaw agradeció el aliento de la hinchada local, que acompañó al equipo durante todo el partido en el Teatro de los Sueños.