LOS ÁNGELES – Aprendiendo a ganar.
Eso es lo que han estado haciendo los Lakers a lo largo de las últimas semanas, encontrando formas de ganar partidos en los que no presentan su mejor versión.
Así fue que el miércoles, empleando una rotación con cuatro armadores y sin Josh Hart o Brandon Ingram, los laguneros se recuperaron rápidamente de un pozo temprano de 15 puntos para sacar adelante el juego ante Orlando Magic, sumando en el camino su victoria No. 29 de la temporada.
Definitivamente se sufrió de más ante un equipo con la tercera menor cantidad de triunfos en la NBA, y Luke Walton no ocultó su malestar tras un cierre que dejó mucho que desear.