EL SEGUNDO – “Jugadas ganadoras”.
Esa fue la frase de cabecera de Luke Walton a lo largo de la temporada pasada al referirse al impacto de Lonzo Ball en el equipo y sus compañeros.
Y eso fue, precisamente, lo que hizo el armador en su regreso a las canchas tras una ausencia de casi 200 días por una lesión en su rodilla izquierda.
El oriundo de Chino Hills vio 23 minutos de cancha, y pese a la inevitable fatiga dada la inactividad, logró dejar varias pinceladas de lo que lo convierten en un jugador clave para el éxito de los laguneros esta temporada.