LOS ÁNGELES – Los Lakers dejaron en evidencia una pronunciada mejoría pero al mismo tiempo demostraron que todavía están lejos de las actuaciones que buscan.
El equipo dirigido por Byron Scott tuvo un buen arranque en el primer cuarto y llegó a ganar por dobles dígitos, pero una vez que la ofensiva se apagó, la defensa sufrió mucho para mantener el resultado.
La sensación que queda es la de un muy buen esfuerzo desperdiciado, ya que el equipo tuvo pasajes de mucha concentración en el segundo cuarto y sobre el final del encuentro. La defensa tuvo momentos prometedores – algunos con Roy Hibbert en la pintura y otros con el atletismo de Tarik Black en la llave – pero estos terminan siendo a cuentagotas comparados con las desatenciones del resto del partido.