Él apenas estaba comenzando.
Al minuto 88 y el jugador de 18 años de edad con su holgado jersey de manga larga rojo, sube por el ala izquierda y lanza un centro bajo al defensor de Miami Fusion, Tyrone Marshall, el cual se convierte en un autogol.
Con los brazos en alto, el niño corre hacia las gradas para celebrar con los delirantes fanáticos del Chicago Fire que saben en ese momento que la U.S Open Cup Lamar Hunt del 2000 es suya.
DaMarcus Beasley, para ese entonces un veloz y ágil atacante a tres meses de ganar su primer título de los EE.